Lluvia y desborde



Ni todo el amor del corazón,
ni toda la visión del intelecto,
ni todo el paso del tiempo,
ni toda la resignación  del ego
son suficientes
para combatir
la ausencia de los cuerpos.
En mi ser se juega
una batalla campal.
La justicia
pareciera no existir.
Sólo me queda
la legitimidad que Zaratustra
pudiera darme,
las palabras
de las palabras
de otro.


City Bell, julio de 2018